Clase de
palabra que funciona ordinariamente como adyacente del nombre, esto es, como complemento nominal adjunto que se sitúa delante o después del sustantivo a que se refiere.
Por significado, señala una cualidad atribuida a un sustantivo, bien abstracta (percibible por la mente, como en "libro
difícil"), bien concreta (percibible por los sentidos, como en "libro
azul").
En cuanto a su morfología, el adjetivo no posee accidente de género o número, sino que lo adquiere del sustantivo al que determina o bien del artículo que lo acompaña, cuando se ha producido una metábasis. Admite, además,
afijos y morfemas de grado superlativo (los sufijos
-ísimo,
-érrimo). Es determinado asimismo por
adverbios cuantificadores que le confieren los otros grados, el comparativo de igualdad (
tan), de superioridad (
más) y de inferioridad (
menos), así como el grado superlativo analítico (
muy,
harto bueno). Lo sustantivan o transforman en sustantivo el artículo neutro
lo ("lo bueno") y el masculino
el y, además, la supresión del sustantivo en una lexía habitual:
el barco velero = el velero.